Ir al contenido principal

Entradas

Astrología y el miedo al poder.

Muchas veces tenemos miedo de no ser capaces de manejar el poder que podría darnos el hecho de abrirnos al mundo transpersonal. Probablemente, lo que nos asusta no es el poder en sí, sino más bien el uso o abuso que podamos hacer de ese poder. Cuando entramos en contacto con nuestro Sí mismo Superior seguramente nos volvemos más poderosos, porque del Sí Mismo emana una vibración mucho más fuerte que el yo, y eso atrae a otras personas e influye sobre ellas. ¿Y si no sé usar con prudencia ese poder? ¿Y si mi poder me lleva a herir de alguna manera a otras personas? Estas son algunas de las preguntas que vienen a consecuencia de este temor. Este miedo es bastante común en las personas que tienen el Sol en aspecto con Plutón, sobre todo en la generación que tiene a Plutón en Leo (nacidos entre 1937 y 1958) (Sol conjunción Plutón, o Sol oposición Plutón). Pero también es válido para otros aspectos del Sol a Plutón en otros signos. Cuando tenemos algunos de estos aspectos nos preocup

Astrología y el miedo a la responsabilidad

Cuando tenemos miedo a la responsabilidad, es muy posible que estemos pensando que si nos abrimos a nuestro Sí mismo Superior, ya no podremos seguir siendo niños, tendremos que crecer y ya no podremos permitirnos las debilidades. En estos casos, estar en contacto con el Sí mismo Transpersonal implicar un deber y una responsabilidad muy pesados. Muchas personas se cierran al conocimiento de su verdadera conexión con el resto de la vida porque les da miedo la responsabilidad que eso implica. Podemos creer, y con razón, que el conocimiento es una manera de reducir la angustia. Si uno puede entender como funciona algo, es probable que el miedo pierda fuerza, pero el tema que nos ocupa es el reverso de esta cuestión. Un mayor conocimiento genera angustia porque lleva consigo la carga de la responsabilidad. Estar al tanto de algo implica dejar de quedarse quieto y hacer algo para resolverlo. Puede que entrar en contacto con nuestro Sí mismo Superior sea demasiado, no nos sentimos capa

Astrología y el miedo a perder la individualidad.

El Sí mismo Superior incluye tanto la individualidad como la universalidad, esa parte nuestra que es ilimitada, eterna e infinita y que compartimos con el resto de la creación. Si uno está en contacto con este nivel del ser, está en armonía con el universo, y actuamos de acuerdo a las leyes universales. Obviamente se trata de un estado de consciencia positivo, no sólo en relación a nosotros mismos, sino también en referencia a los demás. Pero, desprenderse de la condición de individuo separado para fundirse con algo mayor que nosotros mismos asusta a la mayoría de las personas. Al abrirse a lo transpersonal, se activa el miedo a aquello que no tiene forma. Tenemos miedo de perdernos en el infinito. Simplemente nos da miedo perder nuestra individualidad. Este miedo a perder forma es particularmente fuerte en las personas que necesitan controlar la situación, cuyas fronteras son rígidas y definidas. Esto es muy frecuente si tenemos a Saturno muy dominante o tenemos un gran predominio

Astrología y el miedo a cambiar

Si tenemos miedo a cambiar, conocer algunas posiciones planetarias o configuraciones en nuestra carta natal puede ayudarnos a identificar estos miedos y la razón por la cual nos asusta entrar en contacto con nuestro Sí mismo verdadero. Si tenemos a Saturno en la casa IX o en aspecto con Júpiter, es muy posible que proyectemos  el Super Yo sobre su Sí mismo Superior. Esto también sucede si tenemos Saturno en Sagitario o Júpiter en Capricornio. Cuando Saturno está en contacto con Júpiter los temas morales y éticos que se infiltran en nuestro sistema de creencias. Nuestra filosofía de vida se mezcla con el deber ser y podemos sentirnos culpables cuando no estamos a la altura de nuestros principios más elevados, esto es decir, cuando no logramos responder de acuerdo a nuestras creencias, y hasta podemos sentirnos juzgados por su Sí mismo Superior, que puede parecernos autoritario y dogmático. Estas configuraciones realmente representan cierta rigidez, porque nos exige actuar de acuerd

La resistencia a lo sublime

Está bastante claro que la razón por la que nos resistimos a ser quienes realmente somos es que esto significa enfrentar facetas de nuestra personalidad que nos asustan o nos resultan amenazantes, las cuales hemos reprimido por una u otra razón. En general, lo hacemos para obtener el amor de nuestros padres en la etapa de la niñez.  Liberar el sí mismo verdadero significa tener que llegar a un acuerdo con nuestra sombra, y eso no es especialmente agradable. Entonces cabe preguntarnos por qué somos tantos los que nos resistimos a abrirnos a las energías superconscientes y del Sí mismo Superior. (adaptación, “Dinámica del Inconsciente” Liz Greene)

Escorpio, la clave para emerger

Cuando llegamos a este mundo somos fundamentalmente Cáncer, dependemos de la corriente afectiva de nuestro entorno para sobrevivir, y necesitamos de un lugar seguro donde desarrollarnos, este lugar es la familia. Dentro de este núcleo se va conformando nuestra personalidad para llegar a ser profundamente Leo, un individuo diferenciado. Ser Leo, es totalmente necesario. El yo es necesario, porque si no tenemos una estructura de personalidad sólida, cualquier manifestación de Urano, Neptuno o Plutón nos ubica al borde una personalidad psicótica. Para poder trascender el yo es importante primero haberlo formado. De esta manera el yo es el puente entre las experiencias básicas y las sublimes. Escorpio es la llave que nos abre la puerta a lo misterioso que somos, porque Escorpio es muerte y transformación. En un sentido, es la muerte del yo, y atravesar Escorpio significa estar dispuestos a dejar morir la imagen que tenemos de nosotros mismos. El yo se convierte en la fuente

Venus en aspectos difíciles con Saturno

Cuando en nuestra carta natal Venus se encuentra en conjunción, cuadratura y oposición a Saturno estamos frente a uno de los símbolos de una niñez solitaria y llena de privaciones emocionales, de sentimientos de aislamiento y de no ser amado o digno de amor. Debido a que en los comienzos de su vida, en la familia hubo algún tipo de privación o retraimiento emocional, es probable que el individuo no haya podido hacer ese crítico viaje de separación de los padres, ya que a cualquier niño se le hará poco menos que imposible separarse de algo que jamás ha tenido. Sólo es posible levantarse de buena gana de la mesa si uno siente su hambre satisfecha; si está muriéndose de hambre, no puede pensar nada más que en la comida. Es decir, que hay un lugar al que se ha de llegar antes de que se pueda alcanzar la posición depresiva de una individualidad aparte, y por consiguiente, una de las características de los contactos difíciles entre Venus y Saturno, mientras no se trabaja con ellos en

Venus y Neptuno: el amor.

Venus representa un amor más egoísta. Venus dice: “Si me amas te amaré”. El de Neptuno es un amor más desinteresado y dice: “No me importa lo que hagas, te amaré incluso cuando no puedas darme lo que necesito”. Venus se enriquece a través de la relación, la identidad de la persona se fortalece en la unión con otra persona, en particular si esa otra persona se la considera valiosa. Neptuno en vez de fortalecer su identidad por medio de una relación, buscar perderse a sí mismo fundiéndose con otras personas. Venus quiere igualdad y justicia en su relación con los demás. Neptuno, en cambio, se sacrifica por los demás. Al ser lo que los otros necesitan, Neptuno trasciende su condición de individuo aparte. Venus es más personal y está más atado al yo.

La Depresión y la Astrología

Escorpio y Capricornio, son principalmente los dos signos que tienden a expresar sus problemas mediante la depresión, porque de alguna manera sirve a los propósitos de cada uno.  Capricornio tiende a deprimirse para expresar su conflicto interior, porque la depresión le sirve al sentimiento de culpa que es natural en él.  Saturno, que es el planeta regente de Capricornio ve a la depresión como una forma de expresar la ira vengativa, pero al mismo tiempo, ante los ojos de los demás mantiene cierta inocencia. Pensemos que esta depresión excluye a todo el mundo. Con Saturno uno siempre puede lamerse sus propias heridas. Es el tipo de depresión en el que la persona se aísla y se aleja del entorno. Para Escorpio es diferente. Ser vulnerable significa renunciar al poder, algo que con frecuencia asusta mucho a los escorpianos. Necesitan justificar la desconfianza y el retraimiento mediante la provocación de un agravio. Para Escorpio, la depresión puede ser una forma de agresividad

Las cualidades transpersonales de Plutón

A Plutón podemos asociarlo con el coraje, el poder, la fuerza, la voluntad, la regeneración y la renovación. Como explicamos en las notas de Urano y Neptuno, estas cualidades entrarán a nuestras vidas a través de los planetas que hagan aspecto con Plutón. Por ejemplo si Plutón hace un aspecto a Mercurio tendremos una mente capaz de profundizar y nuestros pensamientos tendrán especial potencia. Pero si Plutón hace aspecto a Venus, entonces será a través de las relaciones que tendremos mayor fuerza y coraje. Podemos ser transformados, despedazados y reconstruidos mediante el amor. Plutón representa la muerte y renacimiento, pero también refiere a los mundos subterráneos, a lo que está enterrado en nosotros mismos. Entonces cualquier planeta que se relacione con Plutón será el mediador por el cual traigamos a la luz nuestros complejos más escondidos, temas inconclusos de la niñez, nuestros sufrimientos más tempranos.  Sin embargo, al establecer contacto con nuestros complejos más pro

Las cualidades transpersonales de Neptuno

Las cualidades transpersonales que nos llegan a través de Neptuno son la compasión, la inspiración creadora, la generosidad, el amor, la devoción, la belleza, la serenidad, la paz, la aceptación y el servicio.  Así como Urano, cuando Neptuno está en aspecto con cualquier planeta de nuestra carta natal, estas cualidades están tratando de entrar a nuestras vidas. Cabe aclarar que Neptuno se asocia también con la confusión, el caos y el engaño, pero en este caso nos centraremos en las cualidades transpersonales más positivas de este planeta. Cuando nos afecta un tránsito de Neptuno podemos sentirnos confundidos, como sin anduviéramos avanzando en la neblina, el yo se vuelve permeable, todo nos afecta, nos toca, nos llega, pero estas condiciones pueden llevarnos a abrirnos a dimensiones espirituales. Es decir, que hasta las manifestaciones más negativas sirven a algo superior. Por ejemplo, si Neptuno hace un aspecto a Venus, entonces estamos destinados a llegar a la compasión y el

Las cualidades transpersonales de Urano

Podríamos relacionar a Urano con un sentimiento de liberación: la libertad, la originalidad, el desapego, la voluntad, la verdad, la luz y la sabiduría. Urano también representa el respeto por la individualidad y por la independencia personal y la independencia de los demás, el trabajo en equipo, la cooperación y la fraternidad. Si Urano hace aspecto con un planeta de nuestra carta, cualquiera de estas cualidades está tratando de ingresar en nuestras vidas por mediación de ese planeta aspectado. Por ejemplo si Urano está en aspecto con Júpiter, uno puede descubrir estas cualidades transpersonales a través de los sistemas de creencias o los viajes. La filosofía de vida de una persona con este aspecto puede desafiar el tipo de pensamientos más convencionales que se imponen en la sociedad, ya que podrá ver todo desde una perspectiva más amplia. Si Urano está en aspecto con Venus, las cualidades transpersonales se expresarán a través de la creatividad, las relaciones o el amor. Por