El Sol en Capricornio

    Para el Sol en Capricornio, el deber ser es ley. Una conciencia moral firme y un superyó implacable lo guían a hacer lo que corresponde, volcando toda su energía hacia el logro. Alcanzar la cima —personal, social o material— es su máxima realización. Para llegar allí, recurre a esfuerzo sostenido, perseverancia, disciplina estricta y compromiso absoluto. Su fuerza de voluntad es inquebrantable.

    Sin quejas, cumple con lo que se propone, dejando de lado todo lo superfluo para concentrarse en lo esencial. Firmeza, austeridad y sencillez son las claves de su energía. Puede transmitir una imagen de estructura rígida, sobreadaptación, racionalidad y frialdad. La responsabilidad está en la base de cada acción, y su exigencia puede volverse severidad, tanto consigo mismo como con los demás. Madura antes de tiempo y asume la ley y la autoridad como principios incuestionables. Consciente del valor del tiempo, no lo desperdicia: planifica, prevé, traza una hoja de ruta y la sigue sin desviarse un milímetro.

    Ambicioso, busca reconocimiento y prestigio. Aunque le lleve toda una vida, alcanza sus metas gracias a sacrificios y renuncias, en parte para encubrir un miedo profundo al fracaso. En el fondo, vive en estado de preocupación constante.

    Es conservador, autosuficiente y muchas veces solitario. Rara vez necesita de otros y le cuesta pedir ayuda. Sin embargo, puede convertirse en un pilar firme para quienes lo rodean, ya que su capacidad para sostener y acompañar es prácticamente inagotable.